viernes, 23 de septiembre de 2016

(Cap. 1) En moto por lugares con encanto y otros no tanto





Este verano queremos hacer otro largo viaje en moto que nos lleve por la Costa Brava, continuar hacia Francia costeando el Golfo de León y llegar hasta el Parque Natural de Les Calanques que está entre Marsella y Cassis. Si nos da tiempo de regreso tenemos intención de pasar por Carcassonne y ver algunos enclaves y castillos Cátaros para regresar a España atravesando Andorra.


Pero creo que lo correcto sería empezar mi relato presentando nuestra nueva compañera de viajes. Es una Honda Varadero XL 1000 V del año 2005. Vender nuestra querida Honda Shadow 750 fue un paso lógico para evolucionar y añadir un plus de comodidad y seguridad para nuestros viajes en la modalidad V.M.L.R. "Vacaciones en Moto de largo recorrido".




Hace poco más de tres meses que me estoy adaptando al cambio de montura y este va a ser el viaje definitivo en que trate de domar sus 93 CV y sus 244 kg en vacío y más de 300 kg. cargada con todo el equipaje.


La Varadero es todo brío y potencia bruta pero con nobleza. En cuanto me subí a ella el día que la saqué del concesionario de "Espaciomoto" en Gijón, me vino un viejo recuerdo a la mente, una serie de televisión protagonizada por un hermoso caballo negro de nombre "Furia". Así llamaré a mi nueva moto, "Furia"







 

LUNES 1 DE AGOSTO DE 2016
DE POLA DE LENA (ASTURIAS) A CASTILLO DE JAVIER (NAVARRA)


Reviso por ultima vez el equipaje pues me da sensación que vamos a media carga. La capacidad de las maletas es increíble y eso me da la sensación que nos olvidamos de algo. Es verdad que la experiencia es un grado y en cada viaje que hacemos ajustamos más la cantidad de trastos que nos llevamos.

Hacemos la foto de salida como de costumbre. Son las 9:30 a.m. partimos dirección Santander pues nos apetece ir costeando el Cantábrico. En Unquera hacemos una pequeña parada para tomar un café. Hay que ir dosificándose no tenemos ninguna prisa.
Continuamos por autovía, hacia Torrelavega, Bilbao y Vitoria. A eso de las 2:00 p.m. ya el hambre nos invita a hacer nueva parada así que aprovecho para repostar y comer algo rápido antes de seguir ruta por Pamplona.
A estas alturas del día ya llevamos unos 500 km. Así que ya voy pensando en buscar un sitio donde dormir.





Paramos muy cerca del pueblo de Javier en Navarra. Ya que el viaje lo queremos encaminar por lugares con encanto, por pueblos medievales y castillos, Javier es un buen punto para empezar. Aquí está el famoso Castillo de Javier del siglo X. Cogemos el móvil y sentados a la sombra en una gasolinera, buscamos por Booking un alojamiento por esta zona. Enseguida encontramos un alojamiento con una habitación libre y además a buen precio. Es en el Hotel Xabier.


Hasta que no llegamos delante de la misma puerta del Hotel Xavier no supimos que estamos alojados frente por frente y dentro del recinto del Castillo de Javier. No puede ser un sitio más privilegiado y mejor elegido.



La cosa empieza bien, estamos en un hotelito de lujo con un entorno de lujo. El único fallo es que no hay parquing cerrado para "Furia". Comento a la recepcionista que no me gusta mucho la idea de dejar la moto en la calle y muy amablemente me dice que puedo guardarla a buen recaudo y gratis en el almacén del hotel. Estupendo, se agradece el detalle, así que le quito las maletas y la guardo entre las cajas de bebidas, herramientas y trastos viejos.

La habitación es amplia y bien orientada, lástima que en lugar de una cama de matrimonio tenga dos camitas pequeñas pero aún así es chula, con su balconcito y todo.






El hotel tiene una decoración un tanto "vintage " pero bueno, encaja perfectamente con el entorno. Aquí al lado está el museo Francisco Javier, el santo que nació y vivió hasta los 19 años de edad en este castillo perteneciente a sus padres. El Santo fué un auténtico viajero embarcándose en la tarea de evangelizar las Indias Orientales. Sus pasos le llevaron por la India, las Molucas, las Malacas, Mozambique y Japón. Cuando pretendía llegar a China murió en las costas de la isla de Sancián en 1552.

Nosotros nos sentamos en la terraza para comernos unos bocatas regados con un par de cañones de cerveza bien fría.



Ahora me lo puedo permitir, la moto ya no se va a mover y a estas horas sabe a gloria, un regalo para el cuerpo que nos daremos al final de cada día.








Ya solo nos queda dar un paseo por la explanada y por los jardines antes de ir a descansar a nuestra habitación con vistas.



En la larga ruta de hoy descubrimos la comodidad y buenas sensaciones que nos ofrece nuestra nueva moto. Me siento como niño con zapatos nuevos aunque todavía con miedo a que me hagan ampolla.
Puedo decir que es una devoradora de kilómetros a la que conseguiré domar, estoy seguro.







MARTES 2 DE AGOSTO DE 2016
DE JAVIER (NAVARRA) A ULLDEMOLINS (TARRAGONA)





Dormimos bastante bien y amanece un día estupendo totalmente azul.



Tenemos el desayuno incluido con vistas al castillo. Sin demorar demasiado, pagamos el hotel y nos echamos a la carretera antes de que apriete el sol.





Una foto de despedida del frondoso Hotel Xabier que se lo está comiendo la hiedra. 

Y otra frente al bonito y bien remozado castillo. Al parecer a finales del siglo XIX estaba prácticamente en ruinas y fue restaurado en su totalidad con fondos privados. Finalmente fue donado a principios del siglo XX por su dueña la Duquesa de Villahermosa a la Compañía de Jesús con la condición de que fuera mantenido en buenas condiciones.




 Rodamos felices, con una mañana soleada pero fresca por la N-240 que discurre bordeando el embalse de Yesa.  Este embalse me llama la atención por su extraño color, un raro color azul pastoso.




La carretera es una verdadera delicia que nos va regalando vistas de lujo.



Dejamos Jaca, Sabiñánigo y continuamos por la N-330 directos a Huesca.

Inolvidable el magnífico trazado del Puerto de Monrepós (1.262 m.) que en toda la subida tiene un carril para vehículos lentos lo que nos permitió sacar chispas a nuestra moto.

Sin entrar en Huesca tomamos dirección Barbastro y ya empieza a apetecer hacer un alto en el camino para refrescarnos, así que a las afueras de Huesca paramos a tomar algo.




La ruta que nos llevó entre Huesca y Lleida fue lo que se dice "variopinta".






Rodamos por algunas rectas infinitas de asfalto impecable.






Y también nos encontramos con unos kilómetros totalmente off-road. Un par de tramos de unos 5 km cada uno en obras. La bonita nacional sin previo aviso se convierte en pista de tierra suelta y gravilla, sin ningún atisbo de asfalto, ni firme.
De mano se me pusieron los huevos de corbata pero enseguida descubrí gratamente que la Varadero se comporta estupendamente en este tipo de terreno. Nada que ver con la Shadow que nos hubiera sido al punto imposible de pasar sin irnos al suelo.




A pocos kilómetros de Lleida ya estamos cansados y castiga el calor así que hacemos un alto en Alcarras para comer.
Elegimos, bueno, más bien nos topamos al paso con el restaurante C'al Juanito, y paramos pues está el parquing lleno de camiones. Es el mejor indicativo, ellos saben donde sirven los mejores menús, más baratos y más abundantes. Y efectivamente acertamos de pleno.

Se está de lujo en su comedor con su aire acondicionado, no apetece marcharse pero debemos volver a la carretera.



Tan solo 15 km más adelante entramos en Lleida capital y decidimos hacerle una breve visita.


Lleida no es demasiado guapa aunque desde todo lo alto, desde la Seu Vella, hay unas vistas panorámicas fantásticas de todo el conjunto de la ciudad.



Vueltas y revueltas por el casco histórico nos llevan al Conjunto Monumental de la Seu Vella y Castillo del Rey al que podemos acceder con la moto a través de la Puerta del León.



Y ahí estamos con todo el calor del mediodía tratando de hacernos un selfie mientras decimos "dientes, dientes" para salir bien sonrientes.



Desde aquí arriba podemos distinguir la llamada "Estación de Lérida Pirineos" donde Renfe sirve varias líneas regionales, nacionales y, desde 2003 la Alta Velocidad Española, osea el AVE.




Bueno ya estamos hartos así que dejamos la ciudad pero no sin antes llevarnos un par de sustos sin consecuencias, como el que nos dio un imbécil con una scooter que casi nos traga al adelantarnos por la derecha ó cuando casi me salto un semáforo por estar colocado en un lugar totalmente inverosímil.






Enseguida abandonamos la autovía para rodar por una carreterita muy revirada y vistosa con tramos de sombra que alivian mucho el calor.


Atravesamos una zona preciosa y arbolada del Parque Natural de Montsant. Que cosas, venimos de Asturias, Paraíso montañoso y verde  y estamos encantados cuando nos topamos con territorios que nos hace recordarla.




Dirigimos nuestros pasos hacia el pueblo de Ulldemolins pues aquí reservamos alojamiento para esta noche. A ver con que nos topamos hoy. Esta modalidad de viaje es muy entretenido pues cada día es una sorpresa. Nunca sabemos donde terminaremos.


La Fonda Toldrá es nuestro lugar de hoy y está regentada por una pareja mayor supersimpática.




 La fonda tiene una mezcla de decoración de hace treinta años mezclada sin mucho acierto con detalles IKEA.


Tenemos un lavamanos en la habitación y el baño compartido pero a nosotros nos vale  El dueño, que también se llama Javier,  me permite meter la moto gratis en su garaje particular aunque sea apretujandola contra su coche. Todo perfecto.




Tras una buena ducha para quita el calor nos damos un paseo por las frescas callejas del pueblo.


 Y nos tomamos nuestra cervecita del día para relajamos contemplando el quehacer de los vecinos de Ulldemolins.




Por cierto ya todo el mundo por aquí habla en catalán, estamos ya dentro de la provincia de Tarragona. También proliferan las "Esteladas" por balcones y fachadas.


Ulldemolins es pequeño y vemos que hay más iglesias que restaurantes así que creo que no es mala opción cenar en nuestra Fonda Toldra.





La cena desde luego estuvo estupenda y bien presentada.


Yo me deleité con mi plato favorito, bacalao con pisto al estilo Portugués acompañado de vino de la zona y rematado con un buen postre.


Finalizamos la velada subidos en la azotea de la casa, recostados en un par de tumbonas y degustando un par de Gin-tonic. Charlamos y disfrutamos de una preciosa noche estrellada. Nos llama mucho la atención la cantidad de estrellas que se pueden llegar a ver en los lugares que no hay contaminación, ni lumínica ni de humos. Una estrella fugaz atravesó brevemente el cielo. ¿Nos concederá el deseo?


Hablamos sobre lo curiosos que son estos sitios que nos topamos por sorpresa cuando viajamos sin nada concertado. La gente tan acogedora y simpática que aún no está maleada por el veneno del turismo masivo.









MIERCOLES 3 DE AGOSTO DE 2016
DE ULLDEMOLINS (TARRAGONA) A SANT FRUITÓS DE BAGES (BARCELONA)








Pasamos la noche un poco incómodos por el calor y el "tacataca" del ventilador que sonaba como una matraca, pero aún así descansamos. Rehacemos el equipaje y bajamos a desayunar que hoy también lo tenemos incluido.










Tras engrasar la cadena y revisar niveles (llevamos 900 km.) acoplamos las maletas a la moto y nos vamos de Ulldemolins.






Por fin hoy llegamos al primero de los pueblos que tengo marcado en el mapa como "pueblo con encanto". Visitaremos  el pueblo medieval de Siurana de Prades.




Los 18 km de carretera son más que revirados pero de buenísimo asfalto y a estas horas tempranas sin nada de tráfico.




Siurana de Prades está subido en un enorme peñón de roca caliza con vistas espectaculares y rodeado de acantilados altísimos por los cuatro puntos cardinales.




El acceso de vehículos al interior del pueblo solo está permitido para los vecinos pero tienen habilitado un gran parquing donde se supone que estaba asentado el castillo. Quedan unas pocas ruinas del Castillo, apenas algunos tramos de muro. Fue en la antigüedad un importante núcleo defensivo andalusí. El último reducto musulmán en Cataluña conquistado entre 1153-1154.




Este lugar guarda el sabor de pueblo antiguo, de pueblo medieval muy bien conservado



Cada rincón que descubrimos es más guapo y apenas hay detalles discordantes con el entorno.




Destaca la iglesia de Sta. María de Siurana de época románica construida entre el siglo XII-XIII.


 Pasamos al lado de un crucero y llegamos a una gran planicie de piedra caliza con amplísimas vistas de los montes y valles circundantes.





 Una pequeña valla no impide el paso, pero advierte que estamos entrando en zona peligrosa por estar rodeada de altos precipicios.




 Las paredes caen a plomo  hacia el cañón por el que discurre el río Ciurana.


Vista del río Ciurana y cola del embalse desde el borde a muchísimos metros de altura.




 Es impresionante la panorámica que tenemos desde este punto, no es de extrañar que aquí estuviera el último bastión militar musulmán.


Según cuenta la leyenda "la esposa del reyezuelo de Siurana se llamaba Abd-el-Azia, mujer de extraordinaria belleza. La lucha entre Amat de Claramunt, señor de Tarragona y los moros de Siurana, se oía ya muy cerca, pero la reina creía que Siurana era inexpugnable y celebraba un banquete con sus cortesanos, mientras fuera se escuchaban los sonidos de la batalla.
De pronto, una flecha penetró por una ventana y se clavó en la mesa del banquete, produciendo un pánico terrible: ¡Ya han tomado Siurana! se oyó gritar.
La reina salió, montó su caballo y se escapó en medio de la confusión, pero Amat y los suyos la persiguieron. Llegó a un despeñadero, con un altísimo abismo a sus pies y se lanzó haciendo saltar el caballo al vacío. Fue tanto el impulso, que la bestia dejó marcada la herradura en la roca, y aún puede verse".
Desde ese momento el lugar es conocido con el nombre de “el salto de la Reina Mora”.




 En la cara opuesta también podemos mirar hacia abajo, muy abajo, donde se puede ver el trazado de la carretera por la que "escalamos" al pueblo.






Espero que Carol no le dé por echarse a volar emulando a la reina mora de la leyenda.




Y esta es la preciosa panorámica de Siurana de Prades.


Terminamos la visita de Siurana encantados de haber venido y regresamos por Ulldemolins para tomar la carretera que lleva hacia Montblanc. Rodamos por una zona boscosa y despoblada en la que apenas hay algo más que arboles y vegetación verde.




Llegamos a Montblanc y por supuesto hacemos parada pues también lo tengo anotado como digno de visitar y salta a la vista en cuanto entramos. Su casco histórico fue declarado Conjunto Histórico-Artístico desde 1948.




Tiene 1.700 metros de murallas con una altura media de 6 metros y un espesor de aproximadamente 1,20 metros.
El recinto amurallado tiene un montón de portales o puertas como esta de San Jorge situada en la torre del mismo nombre.  Según la tradición, delante de este portal, San Jorge mató al dragón, de ahí el nombre.


Carol está decidida a llevarse la reproducción de la espada de San Jorge que está soldada a la valla frente a la puerta.


 Esta placa está dedicada a los Dimonis, elementos folclóricos del encuentro de fuego ("correfoc") que durante su actuación combinan el fuego y el sonido de los tambores ("timbalada"). A mi me parece más el manillar de una "Harley Davidson".


Una enorme "Estelada blava" ondea en la plaza al igual que en la mayor parte de los pueblos catalanes de un tiempo a esta parte. Su inventor fue Vicenç Albert Ballester que se inspiró en las banderas de Cuba y Puerto Rico para su creación allá por 1908.






Hace mucho calor para caminar por las calles, así que buscamos donde tomar algo fresco y sentarnos a la sombra. Decidimos que la Plaza Mayor es el mejor sitio para ello. Los arbolitos quedan chulos y dan buena sombra pero no dejan ver el conjunto de edificios, habrá que volver en otoño.




Como es nuestra costumbre no nos complicamos demasiado, pedimos dos platos combinados y una jarra fría en el primer "bareto" que encontramos. Casualmente lo regentan chinos, sería correcto decir ¿que estamos comiendo menú mediterráneo en un restaurante chino? ó ¿comida de chinos al estilo mediterráneo?.


Y para bajar las calorías nos vamos caminando a la zona alta de Montblanc pasando al lado de la Iglesia de Santa María la Mayor conocida como la Catedral de la Montaña, que quedó inacabada a causa de la Peste Negra.
La puerta de la iglesia tiene una de esas cerraduras que tanto me llaman la atención.




 Llegamos finalmente a todo lo alto donde se supone que había un castillo, pero en realidad solo hay cuatro piedras y unos muros bajos en una explanada polvorienta. No hay mucho que ver pero al menos desde aquí arriba disfrutamos de unas agradables vista 360º de la ciudad y todo el recinto amurallado. Y se está a gusto pues corre una brisilla fresca deliciosa.


Dejamos Montblanc y la próxima visita que queremos hacer es la famosísima Montserrat.




Ya desde lejos destacan las raras formaciones rocosas redondeadas destacando poderosas sobre el paisaje. Montserrat , mont  significa monte y serrat, serrado en catalán. Parece que el nombre le viene de su morfología que parece como si hubieran intentado serrarla con una sierra gigante.




 Llegamos tras una subida interesante por carretera de curvas.



El lugar no esta nada mal, la altitud de su emplazamiento sobre el valle permite tener unas vistas impresionantes.






A primer vistazo los edificios no me resultan nada atractivos, de hecho me decepciona mucho su aspecto, más parece que hayamos llegado a un moderno centro comercial con sus restaurantes y tiendas llenas de cachivaches para turistas, que a un importante centro religioso.


Y por si no fuera poco el impacto visual, en el aparcamiento hay una buena colección de tenderetes como si fuera el día de mercadillo en la plaza del pueblo.


Pero cuando rodeamos el edificio feo y entramos en la plaza de Santa María la cosa ya cambia.  Tenemos ante nosotros el santuario y monasterio benedictino dedicado a la Virgen de Montserrat con la fachada nueva frente a nosotros construida después de la Guerra Civil 




Y aún más llamativa es la fachada principal de la basílica. La basílica se comenzó a construir en el siglo XVI y reconstruida por completo en el siglo XIX después de ser destruida en la guerra de la Independencia.

Según la leyenda, en el año 880, un sábado por la tarde, unos pastores vieron descender del cielo una fuerte luz, acompañada por una hermosa melodía. El sábado siguiente la visión se repitió. Los cuatro siguientes sábados los acompañó el rector de Olesa que pudo dejar constancia de esa visión.

El obispo, al enterarse de la noticia, organizó una visita durante la cual encontraron una cueva en la que se hallaba la Santa Imagen. El obispo Vila propuso trasladar la imagen a Manresa pero, al sacar la imagen, esta se hizo tan pesada que no la pudieron mover. El obispo interpretó este fenómeno como el deseo de la Virgen de quedarse en ese lugar y ordenó construir una capilla.



El interior al igual que el exterior, que decir, como todos los grandes edificios religiosos, desprende un gran desembolso monetario se supone que con la intención de enaltecer y alabar a Dios.

Abunda como en todos los edificios de este estilo las hermosas tallas en mármol y en madera, enormes vidrieras, dorados y elaborados mosaicos.











No falta la zona de las velitas para pedir (a cambio del vil metal) deseos ó milagros ó yo que sé, cada uno al final es libre para utilizar su fe como le plazca.




Nos unimos a la fila de turistas para ver la virgen de cerca Y ahí esta protegida dentro de su urna, la virgen negra, la famosa "Moreneta". Por cierto es negra por efecto del barniz que se fue oscureciendo con el tiempo. Hay al menos otras siete vírgenes negras en España y mira una de ellas se encuentra en mi tierra en Bimenes (Asturias).
El lugar desborda solemnidad. Poso la mano igual que veo hacer a los turistas que me preceden en el único trozo que asoma por un agujero del cristal, una pequeña esfera que simboliza el universo y que sostiene la virgen en su mano derecha. El niño Jesús lleva una piña en su mano izquierda y con la derecha hace el saludo motero. Así me gusta, Vssss chavalín.










El entorno de la abadía es muy guapo, muy llamativo y para llegar aquí arriba desde el valle además de la carretera también tienen un teleférico
 

E incluso un tren de cremallera para que nadie encuentre ninguna disculpa para no subir.






Bueno, ya se hace tarde, damos por concluida la visita. Una última foto selfie, que es el único souvenirs que nos vamos a llevar de aquí gratuito.



Antes de irnos debemos pagar el parquing así que meto el ticket en la máquina y en la pantallita pone que tengo que pagar 6,50 €. Y una puta mierda. Las motos, según el cartelito pagan 3,50 €, así que tiro para afuera sin pagar hasta que una barrera me impide pasar.
El tío de la garita al ver el atasco que estoy formando me la abre. Y en cuanto paso y antes que pueda parar al otro lado, sale un "segurata" dándome voces.-¡¡ Eh Alto!!, ¡¡ Alto hay que pagar!!-. y claro ante sus malas maneras tuve que hablarle en modo "Asturiano de las Cuencas".-!! Ostia, joder ¡¡, ¿no ves a la mi muyer pagando en la garita? Cagondíos chaval.....
La cosa es que Carol se subió a la moto y nos vamos. Más adelante me dice: ¿Sabes que el hombre de la cabina no me cobró?. Debió pensar que la máquina no leía el ticket y que por eso no podíamos pasar. Antes de dársela me dice: Ya tenéis la barrera abierta podéis tirar.
Pues nada, aparcamiento gratuito cosa que me alegra, seguro que medió el "niño Jesús" que le gusta saludar a los moteros.





La carretera que desciende hasta el valle es igual de espectacular que la subida. Merece la pena.
Por cierto, antes de salir de Montserrat estuvimos buscando alojamiento para hoy por Booking y nuestra elección es "La Masía de Xaloc". Así que nos dirigimos a buscarlo sin prisa pero sin pausa.



Tardamos un poco en encontrarlo pues está apartado de la carretera principal e incluso tuvimos que hacer de nuevo "off-road" pues el acceso hasta la masía es a través de una pista sin asfaltar.



Llegamos a la finca y no hay gente, no hay nadie, bueno excepto tres conejos corriendo por el prado, mejor eso a que nos hubieran recibido tres "doberman" rabiosos.


Nos mosquea un poco el sitio. A pesar de ser un sitio chulo da aspecto de estar medio abandonado y estar totalmente solos no es normal. Ni un recepcionista, ni un solo cliente, es raro cuanto menos.
 

Damos una vuelta por toda la finca y dudamos de si este será el lugar indicado.
Decidimos entonces llamar al número que hay en la reserva contestan que enseguida nos vienen a atender. Un rato largo después, aparece en una "furgo"un tipo de pelo escaso, sujeto en coleta, un tanto dubitativo ó a lo mejor es que es tartaja y su aspecto no es demasiado presentable. Si estábamos poco moscas ahora ni te digo. 


Nos abre la puerta de la masía y es bonita hasta que nos sube a ver nuestra habitación. Quedamos flipados. Y le digo.-Joder hombre, ¿toda la masía vacía y nos das esto?, ¿Un puto zulo sin ventana?.- Haciendo un esfuerzo abre otras contiguas y se decide por una que tiene ventanas pero está sin hacer y trasteada con calderos y fregonas. En la habitación no hay muebles ni nada, solo hay una cama con el colchón pelao. Ni ropa de cama, ni mesitas de noche, ni una simple silla, ni ostias. Aún así le preguntamos si por lo menos tenemos forma de cenar y desayunar a lo que nos contesta.- No, pues no hay nadie para hacerlo-.; -Nada tío, si no te importa no vamos, no estamos contentos con lo que nos ofreces-. No nos parece de recibo quedarnos allí solos, sin posibilidades de cenar, ni desayunar.


Nos imaginamos lo que sería estar allí sin luces y pasar la noche rodeados de aquel bosque espeso totalmente solos, en aquel viejo caserón y además metidos en un zulo sin ventana. De película de terror vamos, para rodar "Viernes 13"
Ni hablar de quedarnos y además nos quieren estafar pues la reserva es con desayuno incluido y como no hiciéramos una hoguera en el jardín y nos comiéramos un conejo no se que coño podíamos desayunar.
Y lo peor de todo no lo supimos hasta que llegamos a casa al finalizar el viaje. Cual fué nuestra sorpresa cuando al  mirar el extracto del banco nos habían cobrado la habitación, 70 € por nada. El cabrón que nos vino a abrir lo sabía y se lo calló como un ahogado. A lo mejor un día vuelvo a pasar cerca de la Masía El Xaloc y me acerco a saludar. "Arrieros somos y en el camino nos encontraremos".








Al final terminamos en otro lugar a pocos kilómetros.


El Hotel Mon San Benet **** al lado del pueblo de Sant. Fruitos de Bages.



Esto es otra cosa, bueno que digo, esto es lujo, lujo. Una piscina hermosa en la que nos metemos nada más llegar. Y además la tenemos toda para nosotros.







No hay nadie en ella pues apenas queda media hora para oscurecer así que aquí nos quedamos remojando hasta que se nos hace totalmente de noche. ¡¡ Que gozada, que felicidad !!





 Al hotelito no le falta detalle, con habitaciones supercómodas con camas tan grandes que son más anchas que largas.





 y un baño con paredes y puertas de cristal translúcido, neverita repleta de bebidas, cafetera, wifi gratis, televisor, no sé, de todo y más.


Y toda la pared que da al exterior es también de cristal y da a un balcón enorme con vistas a una grandísima zona ajardinada con luces indirectas y al fondo el Monasterio de San Benet, siglo X.


Nos vestimos con nuestras mejores galas por no desentonar, osea pantalón vaquero, camiseta, muda limpia y bajamos a cenar. La verdad que somos la nota discordante entre estos selectos clientes con sus Lacoste en tonos pastel, sus tenis, y su jerseycito sobre los hombros. La camarera nos trae la carta pero no entendemos una mierda, está todo en catalán. De sobra sabe que no hablamos catalán y no nos facilita otra en español. Pues nada, que nos sorprendan, pedimos el menú a lo loco.




Viene el primer plato y es una ensalada que parece que la sacaron de la bolsa del cortacésped. A pesar de tener algunos trozos de frutas tropicales sabe a comida de vacas. Mi cara me delata.



Y traen el segundo, que nosotros lo llamamos "carrilleras con champiñones". Esto si que está espectacular, nos chupamos los dedos literalmente.




Y el postre, joooder, Buenísimo. Para mí "Textura de chocolate con helado de limón" y para Karol un "Mojito de frutas". Al final el día terminó mejor de lo que parecía y además cenamos como reyes.
Vamos a la cama que ya está bien de emociones por un día.










JUEVES 4 DE AGOSTO DE 2016
DE SANT FRUITÓS DE BAGES (BARCELONA) A BLANES (GERONA)








Dormir en cama buena con buen colchón y con aire acondicionado da sueños más felices. Y por cierto solo nos costó 5 € más que la puta Masía, oséa 75 € con desayuno incluido y parquing cerrado y gratuito. La verdad que este año no se si nos alcanzará el presupuesto, Cataluña está de ocupación al 100 % y la oferta y la demanda infla los precios.




Dejamos Sant Fruitos de Bages y dirigimos nuestros pasos hasta Vic en el que ni siquiera paramos y nos desviamos hacia Pruit, por una carreterita sumamente estrecha y revirada. Por suerte solo nos encontramos con un coche en todo el tramo que casi nos traga. Si en lugar de moto lleváramos coche nos hubiera metido todo el lateral para adentro.
Pruit es otro de los pueblos que llevo marcado como "pueblo con encanto".



Cuando llegamos a su "miniplaza" flipamos, pues el pueblo solo se compone de dos casonas adosadas de piedra y una iglesia. Bueno, en realidad tienen todo lo que debe tener un pueblo. Está el antiguo ayuntamiento, la iglesia, la rectoría, la escuela y el horno. También tienen cementerio y algunas masías en los alrededores, oséa todo un pueblo condensado en unos pocos metros cuadrados.


Se me olvidaba que también tienen oficina de correos que son dos buzones, un parque infantil y la plaza mayor aunque mas bien es menor.


Dejamos Pruit y vamos a Rupit otro pueblo que dicen con encanto, espero que sea un poco más grande.




Este ya es otra cosa. Es muy fotogénico, con casas de piedra y muchas flores por las fachadas, edificadas en época medieval algunas del siglo XII, realmente guapo y con todo el encanto de un pueblo bien conservado.


 Las casas se encajan como un "tetris" entre las formaciones rocosas y el río que lo atraviesa.
 Está lleno de rincones muy coquetos y acogedores, bares, tienditas y negocios varios.


 Una curiosa colección de cencerros en una de las fachadas.


 Es muy agradable pasear entre todas estas viejas construcciones de los siglos XVI y XVII.


 Un curioso puente colgante construido en 1945 cruza sobre el río Pruit a buena altura sobre el cauce y un cartel en la cabecera dice:
"NO ESTÁ PERMÉS GRONXAR-S´HE NI PASSAR-HI MÉS DE 10 PERSONES" para que nos quede claro (puro sarcasmo)




Si querían advertirnos de algún peligro pienso que deberían ponerlo en un idioma un pelín más universal.  Tuve que tirar de traductor para saber que peligro nos acechaba  "NO ESTÁ PERMITIDO COLUMPIARSE NI PASAR MAS DE 10 PERSONAS"


 Su núcleo urbano según cuentan está situado bajo las ruinas del que fuera un antiguo castillo.


Las Esteladas aparecen por todos los rincones.




 Caminando por sus callejuelas se entiende por que se considera Conjunto Histórico Artístico.


Sobre algunas casas cuelgan literalmente las rocas erosionadas por los siglos.




 El Racó de Rupit (Rincón de Rupit). La tienda por excelencia para llevarse un recuerdo aunque sea un pequeño imán para la nevera. Nos llevamos algunos para la familia.


 Echamos un vistazo a la Iglesia de San Miguel Arcángel del siglo XIII y nos vamos de Rupit que tenemos muchos otros lugares con encanto por visitar.







Seguimos camino pero de paso vamos echando un ojo por ver si damos con algún sitio guapo para comer. Pasamos por la comarca de La Garrotxa y subimos el Coll de Condreu (1010 m.)


Si pudiéramos ver desde el aire La Garrotxa distinguiríamos claramente algunos conos volcánicos como el volcán Sta. Margarita. Rodamos por muchos kilómetros y no encontramos ningún sitio interesante donde parar a comer hasta que entramos en LLoret de Mar.


Por fin llegamos a la costa, al Mar Mediterráneo, pero también a la marabunta de turistas, de tráfico y eso tras todos estos días por el solitario interior de la península me provoca estrés instantáneo.


Aparcamos la moto y nos sentamos a comer en el Burger King. Y desde aquí mismo intentamos buscar alojamiento para hoy. Enseguida nos damos cuenta que no va a ser fácil. Según Booking está toda la zona al 90% de ocupación y así no hay quien encuentre algo barato. Tras un largo rato de búsqueda conseguimos un bungalów en el Camping Sabanell de Blanes. Es lo único en la costa y cerca de aquí que se adecúa mas ó menos a nuestro presupuesto, 60 € noche.




El camping tiene piscina y chiringuito pero los bungalows son meros casetones de chapa del tamaño de una caravana pequeña. La verdad, comparando el chabolo de hoy con el Hotel Mon Sant Benet**** de anoche,  esto es un auténtico atraco a mano armada.






Es carísima esta mierda, que tiene nevera pero no tiene ni ropa de cama ni almohadas.







Esto no evita que disfrutemos de la piscina y tomemos nuestra cervecita fresca del día.


 



Blanes es un pueblo chulo, el entorno de la playa muy agradable sobre todo porque no está excesivamente saturado de chiringuitos ni invadido de turismo barato de borrachera, griterío anglosajón, vomitonas, orines y sombreros mexicanos como vimos en LLoret.






Disfrutamos de una tarde preciosa al borde del mar, la brisa y una bonita puesta de sol. Cenamos en uno de los chiringuitos, curiosamente a precio razonable.


De regreso al camping nos encontramos con que están pinchado música de baile, salsa concretamente. Terminamos la noche bailando salsa y bachata con unas parejas de Colombia e incluso hicimos alguna coreografía, nos terminó saliendo la vena de profesores.


Meternos en el chabolo nos da bajonazo. Tuvimos que hacer almohadas con las bolsas de la ropa y tratar de pasar la noche lo mejor posible. La cosa es que nos dormimos pronto hasta que nos despertó una fuerte tormenta que repiqueteaba sobre el techo de chapa. No duró demasiado y al final dormimos bien. La verdad que para ser viajero libre hay que ser un todoterreno y no hacer asco a nada.










VIERNES 5 DE AGOSTO DE 2016
DE BLANES (GERONA) A TOSSA DE MAR (GERONA)




El día amanece bastante nublado espero que no nos pille hoy tormenta.
Desayunamos en el chiringuito del camping y mientras tanto buscamos alojamiento de nuevo. Se está convirtiendo en nuestra mayor pesadilla pues ahora Booking nos dice que está todo al 100% de ocupación y lo que queda libre está a precio de "peloputa".
Finalmente damos con una pensión en Tossa de Mar , "Pensión Can Tort". Reservamos para  3 noches, visto que no podemos dejar pasar oportunidades. Son 211 €, desayuno incluido, la única pega que no tiene parquing privado.








Salimos de Blanes con un buen atasco dirección Tossa de Mar. Atravesamos LLoret de Mar lo que fue un calvario de coches, peatones, scooteristas que no conocen normas de tráfico, vamos de todo y más.






Y hay amigos, entrar en Tossa fue más o menos. Noto como el sudor corre por mi espalda por el agobio de ir a paso de burra con el casco y la chaqueta de moto puestos.
Y la "Pensión Can Tort" está situada en todo el medio del casco histórico, un problema añadido pues toda la zona es peatonal y prohibida al tráfico.
No obstante no hago caso de las señales y decido saltarme todas las prohibiciones a la torera, tengo que llegar a la pensión sea como sea, pues no es de recibo cargar con las maletas por todo este laberinto. Deberían dejar paso al menos a los turistas para llegar a los establecimientos. Encontrar dicha pensión resultó ser un punto imposible, ni en moto ni tan siquiera andando. Es que nadie la conoce y no encontramos a nadie que nos pueda ayudar.










Preguntando, preguntando, mirando en Google Maps y tras mucho esfuerzo y una buena pateada logramos llegar a la pensión. Dejamos las maletas en la habitación y de nuevo callejeo y sudo y me peleo con la moto por todas estas callejuelitas estrechas, empedradas y repletas de turistas. Tengo que buscar aparcamiento. Al llegar al parquing de motos que nos indicaron es impracticable para todo aquello que no sea una scooter pues hay que meterlas a calzador. Tengo que buscar otro, este no me vale.




Y lo encuentro en la playa bajo el castillo de Tossa.




En una explanada arenosa separada de la playa por una riera seca. Espero que no se deje caer una tormenta estos días sino acabo buscando la moto en el fondo del mar "matarile rile ron"
Regresamos para instalarnos en la pensión y darnos una ducha refrescante antes de salir a la calle e intentar relajarnos que el día comenzó verdaderamente tenso.





Estamos sedientos y hay hambre así que lo primero es buscar una terracita frente al mar y pedir una gran jarra de cerveza, unos bocatas y unas papas fritas.


Entre uno y lo otro nos entró una flojera tremenda y solo se nos ocurre para quitarla que subir al castillo y como era poco subimos más arriba, hasta el faro de Tossa.




El Castillo de Tossa fue construido en 1387 y declarado Monumento Nacional en 1931. Los acontecimientos mas importantes acontecidos en él a lo largo de su historia fue algún intento de incursiones piratas sin éxito y que fue un lugar estratégico muy importante en el siglo  XIX durante la guerra de la Independencia contra tropas francesas.


 La subida nos deleita con vistas panorámicas de la playa y de buena parte de Tossa.

Desde aquí arriba, haciendo zoom con la cámara, podemos ver nuestra moto, la primera a la izquierda, muy tranquilita descansando a la sombra.


 El emplazamiento del castillo en sí sobre el cerro ya es suficiente elemento defensivo. Se compone de siete torres unidas entre sí por un adarve, osea un caminito elevado ahora con barandilla y suelo de cemento, pero en su época tenía que ser jodido andar por aquí arriba sin valla y con el suelo lleno de piedrolos.


Desde el faro se ve hacia el sur la Costa Brava, bien brava y  hermosa.


El Faro de Tossa de 1917 aún funciona cada noche con sus 10 metros de altura, situado a 70 metros sobre el nivel del mar. En su interior está el Centro de Interpretación de Faros del Mediterráneo.


Al lado del castillo también se encuentran las ruinas de la Iglesia Vella de Sant Vicenç y muy buenas vistas de la ensenada de Tossa de Mar.






Terminamos la visita y bajamos a la playa alargando el paseo hasta la otra punta de Tossa con un punto de vista diferente.


Se nos hace de noche casi sin darnos cuenta y antes de volver a la pensión aprovechamos para pillar algo para la cena en un supermercado y así tratar de equilibrar un poco el desfase de presupuesto que llevamos hasta ahora.



Tenemos dudas de como evitar el mogollón playero por toda esta costa ya que como muestra tuvimos el día de hoy.
Solo ir desde Blanes a Tossa nos llevó medio día y solo son 18 km, claro que buscar la pensión por el laberinto de calles prohibidas nos llevó buena parte de este tiempo.







SABADO 6 DE AGOSTO DE 2016
RUTA POR LOS PUEBLOS MEDIEVALES DESDE TOSSA DE MAR








Desayunamos temprano, a las 9:00 a.m. para salir cuanto antes y encontrar el menor tráfico posible.




La primera visita que hacemos es a Sant Feliú de Gixols y lo más interesante la subida a la ermita de St. Telm.


Con vistas preciosas de 360º sobre la costa y el mar. Preciosa vista hacia el norte.

Mirada hacia el sur.
Seguimos costeando hacia el norte pero terminamos tomando la vía rápida que rodea un tramo de costa hasta llegar a la playa de Aiguablava.






Es muy guapa pero también está muy saturada. Conseguimos aparcar con mucha dificultad a pesar de venir en moto, muchos coches tienen que dar la vuelta, no hay sitio para nadie más.




La calita de Aiguablava es guapísima, encajonada entre acantilados frondosos, casitas blancas y barquitas rematando la estampa.




El chiringuito está menos abarrotado que la arena, que casi es imposible llegar al agua sin pisar sobre toallas. Nosotros nos conformamos con un par de cervecitas bien frías (para el conductor sin alcohol) y disfrutar de las vistas desde la sombra.


Dejamos la playita tras disfrutar del momento y nos vamos a visitar esa lista que llevo anotada de "pueblos medievales con encanto" al interior gerundense.


 Llegamos al primero a Pals, aparcamos, dejamos todo en la moto para visitar el pueblo cómodos y nos vamos a descubrir sus rincones. Lo primero que destaca es la Plaza Mayor con un arco gótico que posiblemente podría formar parte de una lonja o plaza cubierta.



Cada rincón de Pals es atractivo y se destacan los arcos y ventanales de piedra de época medieval.


Hay otros detalles de decoración vintage aunque no de la edad media.


La iglesia de Sant Pere del año 994 fue construida con algunas piedras reciclando los restos del castillo de Pals.


Continuamos encontrando detalles vintage, en este caso es una tienda que entre otras cosas vende cascos de moto estilo antiguo. Me choca pues están totalmente fuera de contesto, quizá precisamente sea un buen reclamo para una tienda de souvenirs.

No solo conservan las calles y las casas sino que además todo está lleno de pequeños jardines, plantas verdes y flores. Esta gente cuida el detalle.


El edificio de Ca la Pruna del siglo XV-XVI está ocupado como museo de Arqueología Marina, exposición de vinos y cavas de Cataluña, salas de exposiciones y una réplica de una antigua botica.


Rincones y más rincones chulos para ver caminando sin prisa.









 De esta construcción defensiva solo se conserva la torre circular románica siglo XI-XIII de 15 metros de altura conocida como la Torre de las Horas porque en el siglo XV se utilizó como campanario.








Y tras la torre tenemos el mirador de Josep Pla, desde el que se ven los campos de arroz y pinos del Ampurdán e incluso las islas Medas en el mar, oséa que no estamos tan lejos de la influencia de la costa. En la antigüedad esta zona era muy distinta pues antaño desde este mismo punto estaríamos contemplando una gran extensión pantanosa salpicada con unos cuantos viñedos.





 





Vamos, que definitivamente el pueblo de Pals es en verdad de visita obligada. Muy guapo, pero que muy guapo, con todo ese encanto de pueblo medieval conservado con esmero. Por cierto tenía esperanzas de que los turistas estuvieran todos en la playa como las lagartijas al sol pero me equivoco aquí también los hay a dolor.





Tras la larga y tranquila visita por el pueblín nos sentamos a comer y tomar muuuucha agua fría. Pedimos además una  buena ración de pescaito frito que está cojonudo.


Carol se decantó por una ración de sepia a la plancha. Pillamos una buena fartura. Sentados en la terraza del bar se nota un calor sofocante no quiero imaginar como estará el asiento de "Furia"que lleva dos horas al solazo. Es el primer día que notamos tanto calor. Echa un poco para atrás el pensar en recorrer el resto de los pueblos del interior pues nos trae recuerdos del calorazo que pasamos el verano pasado por el sur de España.
Pero quien dijo miedo¡¡ a la moto mis valientes!! y bueno, circulando se va bastante fresco con el aire en la cara y la chaqueta abierta.




Llegamos enseguida a Peratallada, declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1975. Aparcamos en el parquing habilitado fuera del casco histórico, lo que me parece perfecto, una vez más están prohibidos los vehículos no autorizados. Si de mi dependiera iría un paso mas allá y los prohibía todos sin excepción. Estámos justo al lado de la Torre de las Horas llamado así porque albergaba el reloj público.


Los edificios son devorados por las buganvillas y la hiedra dándoles frescor  y color a partes iguales.

 
 Fachada del Castillo-Palacio del año 1065.


 Todas sus calles son dignas de ser contempladas y fotografiadas.


 Plaza de Les Voltes.




Con los arcos de la banda norte, los únicos que se conservan.


 No cabe duda que Peratallada es uno de estos pueblos que también nombro como visita imprescindible. Es impresionante como nos puede trasladar al medievo a poco que te pierdas por sus callejuelas empedradas.


 Nos maravillamos con algunas casas de piedra desnuda.


 y otras vestidas de hiedra y buganvillas.










Sin perder tiempo continuamos la ruta hacia La Pera pero según nos vamos acercando no nos parece "la pera limonera" o a lo mejor es que después de ver los anteriores este ya no sorprende tanto, así que seguimos sin detenernos hasta Púbol. Estamos sedientos y necesitamos reponer líquidos así que lo primero es tomar cervecita a la sombra en un bar y relax. Para mi sin alcohol, por supuesto, aunque extrañamente por aquí es difícil encontrarla y la que hay sabe a "aguachirri".




 La Plaza Mayor es lo más interesante que vemos en Púbol.


Y como mucho la Iglesia de Sant Peré, así que movemos ficha.


Cuando llevas viendo varios pueblos de estilo similar enseguida la información se te mezcla en la cabeza y te empiezan a parecer iguales. 



Pero cuando ya pensábamos que el próximo no nos iba a ofrecer nada nuevo nos equivocamos.
Monells nos sorprende y maravilla con su arquitectura.




Monells, tiene un casco histórico muy pequeño, casi una miniatura, pero nos dejó con la boca abierta y muy buen sabor de boca. Se tuvieron que hartar de hacer arcadas de piedra allá en la antigüedad porque los hay por todos los rincones.


 La Plaza Mayor porticada
Monells supongo que ya sería muy visitado por el turismo pero ahora se hizo un grado más famosillo desde el rodaje de "7 apellidos catalanes" que fue precisamente aquí entre estas medievales piedras. Ahora me apetece ver la película, que aún no vimos, para ver si lo reconocemos en alguna de las escenas.




Es el último pueblo que visitamos hoy. Ya llevamos un largo día de moto y de caminatas a pié por calles empedradas, además de haber tenido un día caluroso así que regresamos a la costa por la carreterita sinuosa que nos lleva directos a Tossa de Mar con tráfico escaso por suerte.
Aunque canté muy pronto victoria pues todavía me quedaba un rato de sudor al entrar en el pueblo. Tráfico lento de nuevo, peatones atolondrados y los scooters que no dejan de darme sustos de muerte.








Dejamos la moto en el aparcamiento de la playa, duchita y a la calle a tomar algo fresco. Hoy tuvimos un día muy bueno, bien aprovechado muy entretenido y no nos apetece cenar en la terraza sin vistas de nuestra habitación así que nos vamos otra vez a ver a Eugenia a su Bar al "No T´ho Perdis" osea el "No te lo pierdas"
Solo ofrece bocatas y hamburguesas pero están ricos, ricos y es muy amable con sus clientes y eso para mí es lo más importante.
Sospechamos que ya tenemos un poco de enchufe a pesar de ser la segunda vez que venimos pues en cuanto nos sentamos nos trae la bebida seguida de la cena y había un buen montón de gente que estaban antes que nosotros.
Es lo que pasa cuando tratas a las personas como personas y bueno una pequeña propinilla que era merecida sin duda.
No hacemos más que terminar de cenar y volver a la pensión, estamos machacados.










DOMINGO 7 DE AGOSTO DE 2016
PASEO EN BARCO DE TOSSA A PLAYA GIREVOLA




Hoy tendremos día de relax, día de paseíto en barco y día de playa. Hoy "Furia" se va a quedar tranquilita.
El día se presenta impresionantemente azul, vamos a tener buen día para navegar.
Después de pillar algo en un supermercado y hacernos unos bocatas, preparamos la bolsa de playa y nos vamos a esperar la hora de subir a bordo de un barco chulo de esos con fondo de cristal.






Ya podemos ver los barcos atracando en la playa así que allí que vamos todo contentos.


Pero al llegar nos dicen que el nuestro es esta mierdecilla, que más que barco es una patera, aunque también tiene fondo de cristal, que os pensabais.




A eso de las 12:30 a.m. embarcamos y partimos de la playa de Tossa dando tumbos sobre las olas en nuestra cáscara de nuez.


La mar está muy picada, supongo que se podría decir que hay marejadilla ó algo parecido.


Aún asi tal y como nos habían prometido nos vamos metiendo en todas las cuevas que nos topamos de camino.


Molar mola el paseíto costero, pero la gente va agarrada como lapas a la borda. Salpican las olas dentro de la barcucha y se tambalea que flipas.


Aún a pesar de que no está la costa para bromas nos cruzamos con unos cuantos osados remando como locos en pequeños kayaks.




Incluso algunos nadadores-escaladores que se suben por las rocas escarpadas hasta que no pueden más y se resbalan cayendo como piedras al mar.
 Nueva covacha y con mucha pericia nos metemos de proa hasta el fondo de ella. Son tan estrechas que cojemos justitos, parecemos un supositorio en un culo.


Flipamos en colores cuando al mirar al agua nos vemos rodeados de peces por cientos bullendo y casi saltando fuera del agua.


 Por supuesto solo podemos salir a mar abierto de nuevo dando marcha atrás.




Nos hacemos una foto para el recuerdo.

Dejamos atrás dos pequeñas calas abarrotadas de gente en el camino

Destaca una construcción al borde del acantilado. Supongo que se construyó antes de la ley de costas. Vaya sitio privilegiado tiene el cabrón.


Desembarcamos finalmente en la tercera cala, en playa Giverola. Hay también mucha gente pero aún queda sitio para estender nuestras toallas.

No podemos quedarnos aquí mucho tiempo vegetando sin explorar todos los rincones de la calita. Y descubrimos que a través de un túnel escavado podemos pasar a otra zona de la playa aunque esta es de gravilla y rocas en vez de arena.



Corre la brisa así que se esta de vicio al sol y sin sombrilla y lo digo desde mi punto de vista que soy enemigo de tumbarme al sol como los lagartos, prefiero la sombra como los perros. El agua es limpia y la temperatura perfecta, da gloria bañarse en estas aguas.



Aquí mismo hay un hotel con piscina, pista de tenis, y todo un abanico de pijadas más para no aburrirse. Las instalaciones son solo para clientes del hotel excepto el restaurante.

También hay un chiringuito en la misma arena en el que hoy de menú tienen una paella gigante.


Después de un buen "cañón" de cerveza volvemos a la arena, comemos nuestros bocatas y nos tomamos un café con hielo y un helado en el chiringuito. Está resultando un día cojonudo de auténtico relax playero. Lo cierto es que la playita de aguas turquesa se presta, pues es una bonita cala rodeada de acantilados con abundante vegetación.



Sesteamos sobre la toalla después de comer, nos damos baños refrescante, vuelta y vuelta para coger moreno y sin darnos cuenta llega la hora de regresar a Tossa.







El último barquito es a las 6:00 p.m. y no lo podemos perder o tendríamos que volver a pata.



El viaje de regreso es directo, ahora no nos metemos a visitar cuevas y la mar sigue igual de picada.




Pero sea como sea yo voy encantado, me gustan los barcos, navegar,  me gusta el mar. Al llegar a la playa de Tossa nos la encontramos un poco revolucionada. Está todo el mundo de pié mirando hacia un punto del mar. Por lo que puedo ver desde nuestro barco traen un chaval ensangrentado en una zodiac de la Cruz Roja. Dedujimos que se había caído sobre alguna roca en el acantilado pues le corre sangre de la cabeza, brazos y piernas. Se me vino a la memoria el escalador del acantilado de esta mañana.  ¿Estamos locos o qué?


Tomamos una cañita en el chiringuito antes de subir a la pensión, tomar una ducha y volver enseguida a la calle para dar un paseo tranquilo antes de cenar en algún restaurante frente al mar.






Tras la cena subimos por ultima vez hasta el castillo para regalarnos y disfrutar de unas vistas nocturnas impresionantes.
La brisa del mar curiosamente hoy es fresquita y no estaría de mas una chaqueta, así que enseguida volvemos a la pensión Can Tort para pasar la última noche pues mañana continuamos viaje más al norte.











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2 comentarios:

  1. Bonito viaje Javi. Seguiré los siguientes capítulos con atención, pues es zona que me encanta a pesar de las esteladas y demás jilipolleces independentistas.

    Por cierto, enhorabuena por el cambio de moto y a disfrutarla.

    Vss

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  2. Gracias Paco. Los sitios que me encontré son una pasada de guapos pero todo tiene un pero y lo que más sufrí fué el exceso de turistas, saturación de carreteras, playas y hoteles. Aún así volvería a repetir ahora mismo.
    La Varadero comparado con la Spirit es como la noche y el día. Una maravilla, estoy encantado con el cambio.
    Vsssss amigu.

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